

Al cierre de la audiencia, Fernando Burlando analizó el último testimonio y dijo: “Todo lo que reflejan sus mensajes tenía que ver con este tipo de actitudes. No es lo mismo que hacían un año antes del crimen hasta la salvajada de Fernando”.
Ante la consulta de si cambió su alegato a raíz de los testimonios, contó: “Varió porque se quintuplicó la cantidad de prueba, se aclararon muchas cosas. Si bien teníamos elementos para un fallo condenatorio, eso se amplió”.
También recordó que los imputados se negaron a hacerse una prueba de ADN, pero que es algo que el derecho les permite.
“Mañana habrá un testigo de concepto muy interesante y que habla del mismo modus operandi. Queremos generar la convicción en el tribunal de cómo fue el plan. Que fue delineado y que se organizó rápido. Que ya tenían roles predeterminados desde hace tiempo en situaciones de agresividad. Sabían cómo pegar de a dos o tres”, dijo sobre lo que espera para la décima audiencia.
Luego reflexionó: “Todo el mundo [en Zárate] sabía qué clase de gente era. Uno ahí se pregunta hasta qué lugar un educador se tiene que meter para evitar una tragedia. Creo que la familia sí sabía. Tendríamos que evaluar quiénes son los responsables de tanto salvajismo. Ver por qué fallan los entrenadores, los colegios, las casas, todo”.
“La respuesta de Luciano Pertossi fue una provocación. Fue la misma actitud que tuvieron estos tres años. Eso que hizo, lo hacen los cagones”, dijo sobre el imputado que decidió hablar y analizó: “Estoy convencido de que la desesperación es lo que lo hizo hablar a Luciano Pertossi. Habrá tenido la idea loca de que no había elementos en su contra”.
También el abogado querellante dijo que cree que “puede pasar algo esta noche”, tras la declaración de Luciano, entre los imputados, pero que eso no le interesa. “El corte fue muy brusco. Fue algo que sorprendió a casi todos”, cerró.
Tras el testimonio del amigo del remero Pablo Ventura, concluyó la novena audiencia en el juicio por el crimen de Fernándo Báez Sosa.
Mañana continuará el proceso judicial que busca determinar la culpabilidad de los ocho imputados por el crimen del joven estudiante de abogacía.
Con la declaración testiomial de Francisco Santoro, amigo del remero Pablo Ventura, se reanudó el último tramo de la novena audiencia en el juicio por el crimen de Fernándo Báez Sosa.
Santoro aseguró: “Pablo es un chico muy bueno, estudiante y para nada problemático”.
El joven agregó: “El enojo era cómo estos personajes [los acusados] se manejaban en Zárate. Genera ira su impunidad”.
“Te ponían a prueba para ver tu reacción. Si reaccionabas, ya sabías cuál era el resultado: una pelea, entre comillas, porque no es pelea uno contra cinco personas. El que siempre te pone a prueba es Lucas Pertossi”, detalló Santoro.
Según el joven, los acusados eran personas que “su diversión era buscar pelea. Les divertía pelear”.
Santoro luego recordó una pelea donde cuatro de los agresores le pegaron a un joven. “No era humano lo que estaba pasando. El chico terminó hospitalizado con fractura de cadera”.
Luego reconoció a Lucas Pertossi como uno de los que le pegaron a ese muchacho llamado Facundo.
Tras el cuarto intermedio para almorzar, los acusados regresaron a la sala de audiencia en los tribunales de Dolores.
Consultado por los medios sobre la declaración de Luciano Pertossi, Fernando Burlando dijo: “Lo único que hace es ratificar la postura que tenemos desde el primer día, no solo con esa situación sino con su participación. Creo que tal vez veía cierta debilidad al no distinguir él su rostro en la escena del crimen y trató de llevar esta coartada adelante. Ahora nos damos cuenta de cuál es su estrategia, es decir ‘esa persona que tiene mi ropa en toda la secuencia desde Le Brique hasta la golpiza a Fernando, como no se le ve la cara, no soy yo’. Y obviamente es”.
Tras ello, dio por probada la presencia de Pertossi en el lugar. “Es la misma vestimenta, el mismo grupo y se pueden discernir los roles. Lo que pasa es que uno busca la perfección y en las causas criminales a veces es muy difícil”, explicó y agregó: “Hoy se rompió un poco el pacto de silencio, se fisuró”.
Por otra parte, Burlando se refirió a la presencia de Tomás Colazo, el llamado “implicado n°11”, en la escena del crimen. “Insistimos muchísimas veces por su comparecencia y va a venir ahora, vamos a ver qué es lo que refiere. Va a ser bastante delicado. Se lo ve a Colazo a un costado. Él estaba con el grupo, pero no se lo ve agrediendo [a Fernando]”, se limitó a decir.
Luego de más de dos horas, los peritos de la PFA finalizaron su declaración.
Concluido el cuarto intermedio, se reanuda la audiencia con la declaración de los peritos de la PFA.
Minutos después de la sorpresiva reacción de Pertossi, LA NACION accedió al video que exponían los peritos en el momento en el que el acusado decidió declarar.
“Yo no estaba ahí”, afirmó Luciano Pertossi a raíz de la exposición de los peritos. El acusado rompió el silencio después de que los agentes de la PFA lo ubicaran en la escena del homicidio de Fernando Báez Sosa. A continuación, a los testigos se los hizo retirar de la sala para poder escucharlo.
Tras la salida de los efectivos, el fiscal Gustavo García le preguntó a Pertossi dónde se encontraba entonces al momento del crimen. Sin embargo, este se negó a contestar preguntas del Ministerio Público Fiscal y de los abogados. “No quiero responder otras preguntas, no se esfuercen [en preguntar]”. Inmediatamente después, comenzó un cuarto intermedio.
Luciano Pertossi
La participación del acusado en el juicio tuvo lugar cuando los peritos que analizan las imágenes grabadas del ataque lo ubicaron en el lugar del homicidio en el marco de su exposición, pautada para este jueves. Entonces, Pertossi levantó una de sus manos y su abogado, Hugo Tomei, dijo que su defendido quería hacer una aclaración. Más tarde, el joven se levantó del banco de madera donde estaba sentado junto con los otros acusados y se dirigió a una de las sillas ubicadas en el medio de la sala de audiencias para hacer la breve declaración.
Los ocho acusados de matar a Fernando Báez Sosa -Máximo Thomsen (23), Enzo Comelli (22), Matías Benicelli (23), Blas Cinalli (21), Ayrton Viollaz (23), y Luciano (21), Ciro (22) y Lucas Pertossi (23)- fueron ubicados en la escena del crimen por los peritos de la Policía Federal Argentina (PFA) que analizaron las grabaciones del ataque.
En el marco de su exposición, el perito Andrés Nicolás Bruzzese afirmó que “del análisis fílmico no sale el horario del hecho”, en referencia al homicidio de Fernando Báez Sosa.
Los agentes continúan analizando la actividad de los acusados en la madrugada del ataque en función de los videos.
“Había mucho caudal fílmico para analizar”, aseguró una de las peritos de la PFA, Agostina Matticoli, mientras se despliegan en la pantalla fotogramas tomados de “eventos” sucedidos en el interior del boliche Le Brique. Los mismos, según explicó, se utilizaron par hacer comparaciones faciales.
Con el ingreso de los jueces a la sala, empieza la novena audiencia por el crimen de Fernando Báez Sosa. La jornada inicia con la declaración conjunta de los cuatro efectivos de la PFA que hicieron el peritaje de los videos de la madrugada del homicidio. Se trata de Yanina Cuenca, Agostina Matticoli, Ricardo Pisoli y Andrés Nicolás Bruzzese.
Los agentes exhiben en la pantalla fotos de frente y perfil de los acusados remitidas oportunamente por la Fiscalía.
Tal como estaba previsto, LA NACION confirmó que en el audiencia de hoy declarará Francisco Santoro, el amigo del remero falsamente acusado por lo imputados, Pablo Ventura.
En la etapa de instrucción de la causa, Santoro afirmó que estuvo con Ventura en Zárate en la madrugada del crimen de Fernando Báez Sosa. “Mi mamá se fue a dormir, yo me quedé con Pablo. Cerca de la una de la madrugada, ya el sábado 18/01/2020, Pablo subió una historia al Instagram, de las que duran 24 horas, en la que me veo yo en mi habitación jugando a la computadora. Cuando pasó todo esto, como se borran a las 24 horas las historias, tuve la cautela de hacer una grabación de la pantalla para conservarla”, fue parte de la declaración del testigo.
La declaración de Santoro durante la instrucción de la causa
Al ser consultado sobre las declaraciones de Juan Pedro Guarino y Alejo Milanesi [los dos miembros del grupo que fueron sobreseídos] el próximo miércoles en calidad de testigos, Fernando Burlando expresó: “Si hay algo que me despierta ansiedad y muchas ganas de trabajar es el día en el que concurran Guarino y Milanesi, que no pueden mentir. Vamos a ver qué nos vienen a decir y a aportar, porque en definitiva todo lo que yo comento está probado. Hay que ver si se atreven a decir una cosa diferente a la verdad. Y, si no, obviamente pagarán las consecuencias”.
Tras ello, continuó: “También estamos esperando ansiosamente a aquellos dos profesionales del arte de curar que fueron propuestos por la defensa y que entre otras cosas afirmaron y tejieron supuestos de que Fernando pudo haber fallecido por una reanimación mal efectuada o un aneurisma. Los peritos de parte que firmaron esa pericia juraron defender la vida. Los estamos esperando para que vengan acá a explicarnos por qué mucha gente que trató de colaborar con Fernando no pudo dormir durante días porque tejieron la posibilidad de que a Fernando le habían hecho mal la reanimación”.
El representante del Ministerio Público Fiscal, Juan Manuel Dávila, llega al Palacio de Tribunales. “Se está probando todo lo que dijimos que se iba a acreditar”, dijo en declaraciones a los medios y dio por probada la alevosía. Antes que él arribaron los jueces María Claudia Castro y Christian Rabaia.
A la espera del inicio de la novena audiencia, ya están en el Palacio de Tribunales los abogados defensores Hugo Tomei y Emilia Pertossi. También arribaron Sergio Viollaz, padre de Ayrton; Mónica Zárate, madre de Benicelli y tía de Thomsen; María Elena Cinalli, madre de Luciano y Ciro Pertossi y tía de Blas Cinalli; y Javier Thomsen y Marcos Pertossi, los padres de Máximo Thomsen y Lucas Pertossi, respectivamente.