

Una multitud recordó a Taylor Hawkins, el baterista de Foo Fighters fallecido el pasado 25 de marzo en Colombia. La extensa jornada, desarrollada en el mítico estadio londinense de Wembley, tuvo a los miembros sobrevivientes de Foo Fighters acompañado por una gran cantidad de colegas.
Entre los músicos participantes se destacan Paul McCartney, Brian May y Roger Taylor (Queen), Lars Ulrich (Metallica), Liam Gallagher, Nile Rodgers, Brian Johnson (AC/DC), Chrissie Hynde y Stewart Copeland, entre muchísimos más.
Dave Grohl y sus compañeros de banda caminaron en silencio hacia una larga ovación que hizo llorar al líder del grupo, especialmente cuando la multitud comenzó a corear «Taylor, Taylor».
«Damas y caballeros», dijo finalmente, «esta noche nos hemos reunido aquí para celebrar la vida, la música y el amor de nuestro querido amigo, nuestro compañero de banda, nuestro hermano, Taylor Hawkins. Para aquellos que lo conocieron, saben que nadie más podría hacerte sonreír, reír, bailar o cantar como él. Para aquellos que lo admiraron desde lejos, estoy seguro de que todos han sentido lo mismo».
«Así que esta noche nos hemos reunido con la familia y sus amigos más cercanos, sus héroes musicales y sus mayores inspiraciones para traerles una noche gigantesca para una persona gigantesca. Así que canten, bailen, rían, lloren, griten y hagan un ruido de mierda, para que pueda escucharnos ahora mismo. Porque saben qué, va a ser una noche larga, ¿verdad? ¿Están listos?».
Inmediatamente, Liam Gallagher subió al escenario, momento en el cual la transmisión en vivo de YouTube ya había recaudado más de 10.000 dólares para MusiCares Trust. «¡Taylor maldito Hawkins!», dijo Gallagher cuando los Foo Fighters irrumpieron con el clásico de Oasis «Rock ‘n’ Roll Star». Su característica arrogancia parecía no concordar con la sentida presentación de los Foo, pero fue un comienzo asertivo y poderoso para el show.
Siguieron con «Live Forever» de Oasis, momento en el que Grohl ya parecía que la tensión emocional de los últimos meses se estaba escapando a través de su batería. La forma de tocar del guitarrista Chris Shifflett al estilo de Noel Gallagher ofreció otro contraste con la interpretación de los Foo. «Que tengan una buena noche», dijo antes de abrazar a la banda y abandonar un escenario definitivamente preparado para una noche emotiva.
Tras la muerte de Hawkins, Gallagher le dedicó su interpretación de «Live Forever» en un concierto de Teenage Cancer Trust en el Royal Albert Hall de Londres. El nombre de Hawkins también se mostró en la batería. «Esto es para vos, hermano», dijo Gallagher.
Dos viejos colaboradores de David Bowie, Nile Rodgers y Omar Hakim, entregaron un par de canciones de Bowie. Tras una introducción del comediante Dave Chappelle, la banda improvisada, que también incluía al bajista Chris Chaney de Jane’s Addiction y NHC (el proyecto que compartía con Hawkins), abrió con una interpretación de «Let’s Dance» de Bowie. El cantante de Queens of the Stone Age y Them Crooked Vultures, Josh Homme, lideró el grupo, brindando una interpretación vocal sorprendentemente fiel al original.
Homme cedió el micrófono al cantante de Supergrass, Gaz Coombes, para la segunda y última canción de la banda, «Modern Love». Ambas canciones aparecieron en el álbum «Let’s Dance» de Bowie (1983), que Rodgers coprodujo y en el que Hakim tocó la batería.
Wolfgang Van Halen interpretó un par de temas de Van Halen acompañado por miembros de las bandas paralelas de Hawkins, Chevy Metal y Coattail Riders.
Con el líder de The Darkness, Justin Hawkins, en la voz principal y Grohl en el bajo, y una imagen del fallecido Hawkins con Eddie y Wolfgang Van Halen proyectada en el estadio, el joven Van Halen abrió con la canción «On Fire», insinuando lo que estaba por venir. Después de eso, llegó una versión de «Hot for Teacher», otro clásico de Van Halen.
«Si hay una banda por la que Taylor y yo compartimos un amor musical, es esta banda con la que pasamos muchas noches cantando y bailando», dijo Grohl mientras los fundadores de Pretenders Chrissie Hynde y Martin Chambers subían al escenario.
Al rendir homenaje a Hawkins, Hynde dijo: «Él me amaba, pero yo lo amaba más». Señaló que la próxima canción que iban a tocar era «una que Taylor habría pedido» cuando la banda se deslizó en «Brass in Pocket».
El supergrupo Them Crooked Vultures, con el líder de los Foos, Dave Grohl, junto con Josh Homme de Queens of the Stone Age, John Paul Jones de Led Zeppelin y el multiinstrumentista Alain Johannes, presentaron un set de tres canciones, marcando su primera actuación desde 2010.
Antes de que comenzaran, se proyectó un video tributo de Elton John. «Los Foo Fighters son una de las bandas que siempre dan el 150 por ciento. Nunca dan menos que eso, ni tampoco Taylor», dijo John. «Tocó en mi último álbum, por el que estaba muy emocionado y honrado. Nunca lo olvides».
El set de The Vultures siguió a un enérgico set de la banda británica Supergrass, que era uno de los grupos favoritos de Hawkins y había estado de gira con los Foos. Antes de eso, Grohl, su hija Violet y los invitados ofrecieron un breve set de covers de Jeff Buckley, y el líder de los Foos le dijo a la multitud que nadie podía cantar las canciones de Buckley como Violet.
James Gang se reunió para el concierto tributo a Taylor Hawkins en Londres, marcando su primera actuación desde 2006.
«Si alguna vez has visto una foto de Taylor Hawkins, lo más probable es que llevara un maldito sombrero que decía James Gang», declaró Dave Grohl mientras presentaba al grupo, describiéndolos como «quizás la banda favorita (de Hawkins) de todos los tiempo, y Joe Walsh tal vez su persona favorita de todos los tiempos».
La banda de rock clásico, con Walsh en la guitarra y la voz, Dale Peters en el bajo y Jim Fox en la batería, subió al escenario e interpretó «Walk Away», «The Bomber» y «Funk #49», la última canción con Grohl como segundo baterista.
Cuando promediaba el concierto, el cantante de AC/DC Brian Johnson y Lars Ulrich de Metallica se unieron a Foo Fighters. Al subir al escenario antes de que comenzara, Dave Grohl advirtió al público: «No estamos ni cerca de terminar, ¡espero que estén usando zapatos cómodos! ¡Den la bienvenida al escenario a nuestro buen amigo Lars y Brian Johnson de AC/DC!».
«¡Esto es fantástico!», declaró Johnson ante Foo Fighters. Con Grohl tocando la tercera guitarra, se lanzó a “Back in Black”. Justin Hawkins de The Darkness también se unió brevemente, aunque pareció tener dificultades técnicas con su micrófono.
Luego, la banda irrumpió en «Let There Be Rock», que resultó ser otra actuación áspera pero divertida. Johnson gritó «¡Taylor, esta es para vos!» cuando la canción llegó a su fin. «Eso fue un poco de ruido», dijo después mientras con Ulrich y Grohl compartían un abrazo grupal.
«Taylor, sé que estás mirando, sé que estás escuchando esto, sé que podés ver esto», dijo Ulrich. «Te amamos tremendamente. En nombre de todos en Metallica, nada más que amor». Se podía escuchar a Johnson todavía riéndose cuando ambos abandonaban el escenario juntos.
El exbaterista de The Police, Stewart Copeland, tocó un par de canciones de su vieja banda con la ayuda de varios otros rockeros.
Después de recibir una entusiasta bienvenida de la multitud, Copeland se sentó detrás de la batería. Acompañado por Foo Fighters, con Dave Grohl en la guitarra y la voz, el grupo rockeó por primera vez con una interpretación del single de 1978 de The Police «Next to You». A partir de ahí, el cantante de Supergrass, Gaz Coombes, se unió al grupo y presentó otro clásico de The Police: «Every Little Thing She Does Is Magic».
Geddy Lee y Alex Lifeson, los miembros sobrevivientes de Rush, entregaron un ajustado set de tres canciones que se sintieron a partes iguales como un homenaje al baterista fallecido y al suyo propio, Neil Peart, quien murió en enero de 2020.
La penúltima actuación programada de la noche abrió con imágenes del conocido amor de Hawkins por Queen y, en particular, por el baterista Roger Taylor. Taylor, que vestía una camiseta con el logotipo del pájaro de Hawkins, luego le entregó su batería a su hijo Rufus, miembro de The Darkness, antes de acompañar a Brian May y los Foos en las voces de «I’m in Love with My Car». El compañero de banda de Rufus, Justin Hawkins, volvió a hacer un dueto con Roger Taylor en «Under Pressure», y este último también volvió a sus funciones de batería.
A continuación, Dave Grohl le dijo al público: «Tenemos un invitado muy especial esta noche que quizás no esperen, nosotros tampoco». Agregó que Roger Taylor había sugerido al cantante en cuestión para la canción en cuestión: Sam Ryder, el fenómeno británico de TikTok que representó al país en el Festival de la Canción de Eurovisión 2022, entregó una versión de «Somebody to Love» y parecía impresionado por ser parte de la experiencia.
Finalmente, May fue al final de la pasarela y le dijo al público: «Qué noche tan increíble de amor y música, gracias por estar aquí y por compartir todo esto». Al presentar la balada de Freddie Mercury «Love of My Life», explicó: «En 1986 estábamos exactamente en este lugar, cantando esta canción juntos, y en 1992, hace 30 años, nos despedimos de Freddie con un estilo similar a este. Así que sé que Freddie estaría feliz de compartir esta canción en memoria de Taylor Hawkins. Pero este es el trato: yo no canto esta canción. Cantemos esta canción juntos. ¿Bien?».
El público brindó todo el apoyo que pudo, acompañado por May con una guitarra acústica, quien los animó calificando su trabajo de «hermoso» y «maravilloso», y luego preguntó: «¿Qué les parece si cada uno de nosotros usa nuestra luz? … Iluminemos el estadio de Wembley para Taylor Hawkins». Después de una explosión de luces de celulares, el set terminó cuando May hizo una reverencia, saludó y regresó a la pasarela.
Hawkins era un gran admirador de Queen y señalaba regularmente un concierto al que asistió cuando tenía 10 años como un momento decisivo en su vida.
Finalmente fue el turno de Foo Fighters entregando un poderoso set de canciones para cerrar el concierto tributo a Taylor Hawkins.
La actuación comenzó con un tono comprensiblemente emocional, ya que el grupo interpretó «Times Like These». El cantante Dave Grohl estaba visiblemente luchando por contener las lágrimas cuando comenzó el solo de la melodía. Luego, después del segundo coro de la canción, el escenario estalló con música mientras el resto de la banda se unía. Fue un momento catártico, ya que todo el estadio de Wembley parecía unirse con cada letra.
A partir de ahí, la banda arrasó con una poderosa interpretación de «All My Life», el exitoso single de 2002.
Josh Freese interpretó las partes de Hawkins en las dos primeras canciones del set, pero antes de la tercera, Grohl dio la bienvenida a Travis Barker al escenario. El baterista de Blink-182 entregó su acostumbrado ataque de percusión, mientras él y los Foos tocaban «The Pretender» y «Monkey Wrench».
La siguiente en la lista rotativa de bateristas fue Nandi Bushell. En 2021, la joven estrella viral desafió a Grohl a tocar la batería y eventualmente se convirtió en una amiga cercana de la banda. Sonriendo alegremente y con una campera con lentejuelas y la imagen de Taylor Hawkins, Bushnell interpretó «Learn to Fly» con los Foos.
A continuación, Grohl dio la bienvenida a un «miembro real de los Foo Fighters» a quien la banda conoce «desde que era un niño pequeño». Luego subió al escenario Rufus Taylor, baterista de The Darkness e hijo de Roger Taylor, uniéndose a Foo Fighters para «These Days» y una interpretación dinámica de «Best of You».
A continuación se produjo uno de los momentos más importantes de la noche, cuando Grohl invitó a Paul McCartney y Chrissie Hynde (que había actuado más temprano con los Pretenders).
Tímidamente, Grohl presentó primero a Hynde, «quien trajo a un amigo con ella esta noche. Entonces, todos deberían darle la bienvenida a la señorita Chrissie Hynde, y a nuestro buen amigo, el Sr. Paul McCartney. ¡Por favor, dales un poco de amor!».
Lla banda se lanzó a interpretar «Oh! Darling» de Los Beatles, del álbum «Abbey Road» de 1969. McCartney bromeó diciendo que era una canción que había grabado «hace cien años», pero que nunca había hecho a dúo.
Hynde luego abandonó el escenario, y McCartney se lanzó con una versión de «Helter Skelter», con Grohl aportando ocasionalmente su voz mientras el resto de los Foos resplandecían a través del clásico de Los Beatles.
Aunque McCartney no fue anunciado como uno de los artistas del evento, los rumores de su participación comenzaron a difundirse el viernes cuando una cuenta de fans de Foo Fighters subió un video desde afuera del estadio de Wembley. El ensayo de «Helter Skelter» se podía escuchar fácilmente de fondo.
Que McCartney estuviera involucrado en el evento no es sorprendente. El exBeatle se ha hecho muy amigo de Foo Fighters a lo largo de los años, colaborando con la banda en varias ocasiones.
El hijo del fallecido baterista, Shane, sería el próximo invitado. El joven Hawkins se veía como en casa en la silla que antes ocupaba su padre, tocando la batería en «My Hero».
Grohl, claramente cansado de una larga noche llena de emoción, una vez más agradeció al público y a quienes miraban desde casa. «Espero que hayan sentido el amor de todos nosotros y de todos los artistas», comentó. «Esta es para Taylor», declaró antes de comenzar el clásico «Everlong» de Foo Fighters. Apropiadamente, la canción se interpretó sin un baterista -o cualquier otro miembro de la banda, para el caso-. En cambio, Grohl, el jefe de Foo Fighters y amigo más cercano de Hawkins, cerró el concierto de manera conmovedora solo.
«Te amo Taylor», proclamó el rockero después de las notas finales de la canción. «¡Escuchémoslo a lo grande y en voz alta para el maldito Taylor Hawkins!».
Un segundo concierto en tributo a Taylor Hawkins se realizará en Los Ángeles el 27 de septiembre.