

El viajero Gastón Mónaco, que semanas atrás nos sorprendió contando su experiencia al recorrer la Ruta 40 a bordo de su Honda 250, ahora comenzó una nueva aventura proponiéndose recorrer Entre Ríos, Corrientes, Misiones, Chaco, Formosa, y llegar a los cinco países limítrofes.
Antes de partir, compartió que el mayor objetivo es llegar a “Uruguay, Brasil, Paraguay, Bolivia y Chile, y traerme una bandera de cada uno”. Aunque planea que “para fin de noviembre, ya estaría de vuelta en Necochea”, dejó en claro que no se pone plazos: “Voy a hacer el viaje un poco más tranquilo, disfrutando un poco más del paisaje, de los lugares, me invitaron para ir a Brasil a pasar unos días. Lo único que me hace feliz en la vida es viajar, conocer otras costumbres, otra gente, otros lugares”.
Tras la anterior experiencia por la Patagonia, reconoció estar “un poco más tranquilo, más relajado. Pero bueno, también tenemos que vivir la realidad y hay que volver a trabajar, así que en noviembre vamos a arrancar de vuelta con el choriloco ahí en la 89 y 4, así que los espero al regreso”, agregó sobre su emprendimiento gastronómico.
En cuanto al presupuesto para la travesía, contó que “Hice una foto de viajes que he hecho, de Ushuaia y de la mitad de la ruta 40 que hice el año pasado, varias fotos mías y una de caricaturas, y con eso más o menos voy a ir vendiendo, para decir que me den cada cuadrito un valor de 2 litros de nafta, como para seguir recorriendo caminos argentinos y siguiendo haciendo ruta”.
La firma de Messi
Entre sus sueños, afirmó ir “por la firma de Messi, yo quiero mi moto firmada por Messi, es un sueño a cumplir. Por ahí se cumple, ojalá”.
Volviendo al viaje, remarcó que no tiene más expectativas: “Me voy a encontrar con lo que suceda. Me quedan siete provincias para recorrer en la Argentina con esta moto y sí tengo una intriga con hacer el impenetrable. Quiero ver la costumbre de esa gente que vive ahí adentro, que vive de la naturaleza y a veces nos quejamos porque se cortó la luz”.
En su moto lleva una carpa para descansar en las noches, un poco de ropa y algunos utensilios para comer sobre la ruta. Su expectativa es hace entre 300 y 400 km. por día.
“La gente que realmente tiene un sueño que lo cumpla, que a veces es difícil o a veces tenemos miedo. El futuro ya lo tenemos todos marcado, a veces hay que ir a buscarlo pero creo que los sueños hay que seguirlo y cumplirlo en vida porque si no nos quedamos, con qué lindo hubiese sido… creo que hay que ir por ese sueño que uno tiene dentro de las posibilidades que uno pueda”.